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jueves, 22 de mayo de 2025

Fabrice Hadjadj: "La Libertad viene de la tradición"





Por Paloma López Campo, revista Omnes, 21.V.2025·

Fabrice Hadjadj es un filósofo y autor francés conocido por obras como “La suerte de haber nacido en nuestro tiempo”, “La fe de los demonios (o el ateísmo superado)” o “Por qué dar la vida a un mortal: y otras lecciones”.

Desde hace varios años vive en Friburgo (Suiza), donde dirige el Instituto Philanthropos, una iniciativa que quiere dar a los jóvenes una base sólida en conocimientos de filosofía, teología y en un trabajo manual, todo ello fuertemente inspirado en la mentalidad benedictina.

Ahora, Fabrice Hadjadj y su mujer Siffreine Michel se mudan a España para comenzar el Instituto INCARNATUS, inspirado en el proyecto de suizo. A través de INCARNATUS, Fabrice y su mujer quieren profundizar en la cultura hispanoamericana y, desde las humanidades, ayudar a quienes se sienten llamados a profundizar en la realidad, mucho más allá de lo que la tecnología puede ofrecer.

El instituto todavía está en pleno desarrollo, pero Fabrice Hadjadj comparte en esta entrevista con Omnes las claves que le hacen pensar que las humanidades son la respuesta a las preguntas que nos planteamos hoy, y el secreto para lograr lo que tanto anhelamos: la libertad.

¿Por qué cree que hoy más que nunca es urgente redescubrir las humanidades, especialmente frente al avance de una visión tecnocrática y utilitaria del ser humano?

– La palabra “humanidades” ya da la respuesta, porque interesarse en las humanidades es descubrir tu humanidad. Aunque cuando hablamos de humanidades hablamos de leer textos de autores antiguos y la pregunta es: si somos hombres de hoy ¿por qué tenemos que leer autores antiguos?

La realidad es que para ser libre hay que tomar distancia con respecto a tu época. Si estamos sumergidos en nuestra época, estamos convencidos de que todo lo que se hace en nuestra época siempre se ha hecho así. Cuando leo autores antiguos, no solo entro en una sabiduría humana muy profunda (profunda porque ha llegado a atravesar el tiempo), sino que además tomo distancia con respecto a mi época y me vuelvo libre.

Muchas veces pensamos que la libertad viene de la revolución, pero la libertad viene de la tradición. Cuando leo a Platón o a san Agustín, tomo distancia con respecto a mi época y puedo criticarla. Incluso los revolucionarios franceses leían a los antiguos y se referían a la República romana. También los revolucionarios marxistas, leían a Marx, y Marx leía a Aristóteles. A partir de textos de Aristóteles Marx criticó el capitalismo.

La revolución, la buena revolución, tiene que comprenderse en una relación con la tradición para encontrar la libertad y arrancarnos de nuestra época para verla objetivamente.

¿Cómo ve el papel de la belleza en el despertar del deseo por la verdad y por una vida verdaderamente humana?

– Cuando hablo de teatro y de canto, no hablo solo de belleza, sino también de una práctica. Muchas veces se habla de belleza como un espectáculo, pero a mí lo que me interesa es hacer cosas en la belleza.

Fabrice Hadjadj: “La libertad viene de la tradición”

Por Paloma López Campos, Omnes, 21.5.2025·

La belleza llama a la belleza y lo que me interesa no es el hecho de amar la poesía, sino de volverse el poeta de tu propia existencia. Entonces cuando hablo de canto y de teatro, es para hablar de una práctica de la belleza que entra en nuestro cuerpo y que se lleva en nuestras venas y en nuestros gestos.

En este llevar la belleza en nosotros hay una cuestión de libertad. El problema del mundo moderno es creer que empezamos siendo libres y que no hay que aprender a ser libres. Pero, precisamente al aprender un arte, sobre todo un arte exigente como uno ligado a la belleza, se entiende que la libertad sea un aprendizaje.

Si quieres tocar una guitarra flamenca, tienes que aprender, no puedes hacerlo de golpe. No hace falta ir a una escuela o una institución académica, pero te hace falta un maestro y la tradición viva, que no es una tradición ideológica reconstruida. Esto es lo que veo en el teatro y el canto, no solo la encarnación de la belleza, sino el desarrollo de la libertad.

¿Son el instituto INCARNATUS y Philanthropos proyectos también para personas casadas?

–  Los proyectos se dirigen primero a estudiantes, gente que más bien no está casada y no tienen un trabajo regular. Pero se ha acogido a parejas de prometidos y este año por primera vez hay un matrimonio que estaba dispuesto a entrar en esta aventura y que no tienen hijos. Son proyectos para crear tu propia comunidad, no tanto para estar en tu comunidad.

Habrá momentos en los que podrán participar personas que ya trabajan en su día a día. Hemos visto a gente transformada por ver lo que nosotros vivíamos, eso es lo que dice la palabra de Cristo: “Venid y veréis”. Estamos en un mundo en el que hay tantas palabras y señales enviadas en todas direcciones, que la palabra “ven y ve” es muy importante para que exista una transformación.

¿En qué consiste la crisis contemporánea de sentido? ¿Por qué Dios y la filosofía pueden responder a esta crisis?

– Podemos coger la palabra “sentido” en su significado más elemental. Hay una crisis del sentido y una crisis de la sensación. En un mundo digital no sabemos sentir, hemos perdido el sentido del tacto y del olfato. Tenemos orejas para distinguir señales, pero no para escuchar. Tenemos ojos desmesurados abiertos como bocas que querrían tragar imágenes que se destruyen las unas a las otras, de manera que no llegamos ni siquiera a ver.

Por eso insisto en crear lugares donde pueden recrearse las sensaciones, a través del trabajo manual, los instrumentos de música o por el hecho de estar alrededor de una mesa donde se puede tener una conversación.

La crisis de sentido es una crisis del sentir. Es realmente una crisis en el nivel más básico. Luego hay otro nivel, que es la crisis de esperanza, porque el sentido también es una orientación, un camino hacia.

La modernidad era progresista y estaba persuadida de que el mundo iba a ser mejor. El sentido no era eterno sino temporal y ese sentido era “mañana habrá una sociedad mejor”. Hoy este proyecto progresista de una sociedad mejor ha creado amenazas que son peores que todas las que han pesado sobre la humanidad.

El mundo mejor por el consumo está destruyendo el mundo. Así, las esperanzas modernas se han venido abajo y por eso, aparte de tener que encontrar la base, hay que encontrar la cima, que es una esperanza que viene de más lejos que el propio mundo: una esperanza eterna donde no se hacen las cosas porque mañana será mejor, sino porque Dios nos ha pedido que guardemos y cultivemos el jardín.

Hoy, la esperanza ya no es una opción. Como las esperanzas mundanas se han venido abajo, la esperanza religiosa no es una opción. Por eso, vamos a encontrar al mismo tiempo tanto el cuerpo como el espíritu, para salir de este limbo

viernes, 28 de febrero de 2025

La belleza, esa "ideología"




Por Ignacio Uría (Gijón, 1971) es historiador, periodista y profesor de la Universidad de Alcalá

    A mí todavía me extraña que un adolescente lleve una argolla en la nariz como si fuera un buey cántabro. Eso es propio de tribus amazónicas, contra las que no tengo nada pero que no reconozco como mías. Como tampoco acepto a un universitario que asiste a clase de Metafísica o de Embriología con chanclas y bermudas. Tal indumentaria me arrebata si es para ir a la playa de Estaño, allá en Asturias, patria querida. Pero never-never-never (que diría Shirley Bassey) para abordar los misterios del ser como ente móvil o el espacio que ocupa el saco vitelino. Para tales menesteres prefiero un buen corte de pelo —tipo Marín o Rota—, una camisa y zapatos reglamentarios que oculten mis dedos torcidos. Es decir, me avergonzaría toparme con Aristóteles y llevar una facha más propia de un socorrista que de un tipo corriente, que es lo que soy. Corriente, pero no idiota. Al menos, para desconocer una terca evidencia: la belleza nos ayuda a ir por la vida. La buena vida, la verdadera, la que elige los compromisos sin caducidad y trae hijos al mundo.

    Queda claro que soy un cavernícola. Viva. O quizá me he caído de un guindo y esté delirando. Sin embargo, en ese árbol hay más gente, alguna, inesperada. Por ejemplo, varios institutos franceses, muy laicos y progresistas, que han prohibido a sus alumnas acudir con tanga al liceo. Las muchachas, en su candor, llegaban a clase desplegando una lencería tan ardiente que los radiadores eran innecesarios. Aquello no mejoraba ni abriendo las ventanas. Ante la temperatura del asunto, una exministra de Educación, la socialista Ségolène Royal, dijo que todo era consecuencia del modelo de mujer propuesto a las francesas «en el que el cuerpo femenino se exhibe como una vulgar mercancía». Bien ahí, Ségolène.

    También el Real Madrid ha recordado a su plantilla la importancia del respeto. Emilio Butragueño,ese hijo perfecto que le metió cuatro a Dinamarca, sentenció: «Este club tiene una historia y una imagen. No podemos ofender al rival con celebraciones estrambóticas». Es decir, nada de festejos grotescos después de marcar un gol. Nada de futbolistas haciendo el ridículo con bailecitos pueriles. Vinicius y Rodrygo no lo han pillado, pero todo se andará.

    La última en rendirse a la moderación ha sido la NBA, harta de que los jugadores se disfracen de macarras y traficantes. A partir de este año, todos como un pincel: adiós a esos pendientes más grandes que las orejas o los medallones tamaño rueda de tractor. Ahora reinarán la corbata, la cara limpia y el pelo corto, que hay niños mirando.

LA PREGUNTA DEL AUTOR

¿Es el fracaso de lo bello el fin de la belleza? En tal supuesto, ¿con qué se podría sustituir?

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lunes, 20 de enero de 2025

¿Cuándo la política fiscal es injusta? (artículo póstumo)

 



Por Carlo Caffarra, Cardenal Arzobispo de Bolonia. Recientemente fallecido.









El sistema fiscal es una parte relevante del pacto social, en virtud del cual el ciudadano tiene el derecho de acceder a esos servicios públicos que paga con sus impuestos. Este es el principio fundamental del que se derivan algunas consecuencias que me limito a enunciar. 


1) El Estado viola el pacto social y es injusto si no ofrece los servicios, o estos son de mala calidad, o los más pobres no son tratados equitativamente cuando acceden a los mismos. 


2) El Estado viola el pacto social y es injusto si los ciudadanos son obligados, al ejercer un derecho fundamental, a pagar dos veces el mismo servicio. Como le sucede a quien ejerce el derecho a la libertad de educación de sus hijos. 


3) El Estado viola el pacto social y es injusto si el gasto público, es decir, la utilización de la suma que los ciudadanos pagan a Hacienda, es desorbitado. Es una especie de egoísmo público. Es una enfermedad terrible. La burocracia, aunque necesaria, tiende siempre a generar burocracia. Un gran escritor y poeta del siglo pasado escribió: «Has buscado la salvación en la organización / que no puede producir más que organización» . 


4) El Estado viola el pacto social y es injusto cuando los impuestos son tan altos que hacen imposible la tutela y la promoción de bienes humanos fundamentales, como el trabajo. Pensad, por ejemplo, en las dificultades que atraviesan las pequeñas y medianas empresas. 


lunes, 6 de enero de 2025

"Carta a mí misma" para leer dentro de 10 años, que ya han pasado.

El domingo 5 de enero, la pequeña Taylor Smith, de 12 años, falleció en Johnson City (Tennessee, Estados Unidos), por complicaciones en una neumonía. Sus padres Tim y Ellen y su hermano mayor, Judah, acostumbrados al carácter alegre y feliz de la niña, apenas podían creerlo. “Entre el choque y la depresión, tu esperanza es que no sea algo real. Cada vez que te echas una siesta o te vas a dormir esperas descubrir al despertar que no es algo real"
“Es la hora de Dios, es la hora de Dios…”, añadía, “y Él la amaba más de lo que nadie podía amarla, tanto como para decirle ´Ven conmigo´. Muchos se preguntarán por qué es tan fácil para un padre que ha perdido a su hija decir algo así en vez de acusar a Dios u odiarle, pero lo único que puedo decir es que es fácil para mí confiar ahora en Dios porque mi niña confiaba en Él“.
Impacto creciente
La muerte de Taylor conmocionó al vecindario y a su colegio y luego empezó a tener resonancia nacional y ya mundial, a raíz de conocerse la carta que, sin saber el drama que le aguardaba en la Navidad, se escribió a sí misma en abril para abrirla diez años después.
Es la última de las historias de la pequeña que están descubriendo, pues desde su muerte no paran de consolarles de todas partes con cosas que ignoraban. “Cosas que ella había hecho y no lo sabíamos, en su grupo juvenil, en la escuela… Cosas que afectaron a la vida de la gente en formas increíbles”, cuenta su padre, orgulloso: “Ahora estoy aún más decidido a encontrar cuál es la voluntad de Dios, porque ahora que ves un destello de lo que es la voluntad de Dios, ahora que ves cuánta gente se está viendo transformada por lo que está pasando, sé que sólo con que la vida de una persona cambiase Taylor diría que había valido la pena“.
“Ella es un perfecto ejemplo de lo que es amar a Dios y amar a los demás. Ella me enseñó cómo ama Dios, no veía nada de lo exterior, ella sólo miraba en el interior y qué era lo mejor para ti”, concluye.
Una carta llena de inocencia y amor a Dios

Cuando Ellen y él empezaron a revisar las cosas de su hija, se encontraron, entre otros escritos de Taylor, una carta que ella se escribió a sí misma el 13 de abril con una indicación en el sobre: “Confidencial. Sólo para los ojos de Taylor Smith. Para ser abierta por Taylor Smith sólo el 13 de abril de 2023″. En el interior, los consejos que ella le daba a una Taylor que para entonces tendría ya 22 años. Su padre publicó la carta íntegra, que arranca con un “Querida Taylor, ¿cómo es la vida?” y donde, entre otras cosas, pregunta a la Taylor ya joven si terminó el bachillerato, y la anima a hacerlo si no fue así.

Pero, entre otros comentarios de índole doméstica o infantil, en los que revela que quería ser abogada, la niña incluye un párrafo de emotiva religiosidad que empieza explicando por qué no pudo ir a la fiesta de cumpleaños de una amiga: “Estaba en Cranks (Kentucky), para mi primer viaje de misión. Por cierto, ¿cómo es tu relación con Dios? ¿Has rezado, Le has dado culto, has leído la Biblia o has servido al Señor recientemente? Si no es así, levántate y hazlo AHORA. No me importa en qué momento de nuestra vida estamos ahora, ¡hazlo! Él fue insultado, golpeado, torturado y crucificado por ti. Un hombre sin pecado, que nunca le había hecho daño ni a ti ni a nadie… Y otra cosa: ¿has ido a más viajes de misión?”.
Tras esta muestra del profundo amor a Jesús que profesaba la pequeña y alguna otra cosa más, Taylor concluye: “Bueno, creo que esto es todo. Pero recuerda que lo escribí hace diez años. Mucho ha pasado desde entonces, bueno y malo. Así es la vida, y tienes que asumirlo. Cordialmente, Taylor Smith”.
La Hosanna Fellowship Church, comunidad evangélica local a la que pertenecía la familia y sus padres decidieron darla a conocer : “La esperanza que Taylor compartió en su carta es lo que ella hubiera querido compartir con el mundo. Así que, como su padre, siento que es lo menos que puedo hacer para honrarla, compartir su carta con el mundo para que el amor de Dios y la esperanza encontrada en Jesús, la misma esperanza que ella encontró, se extienda a vosotros”.

Así no actuaron muchos, ni actúan. Esto explica a Hispanoamérica


 

"Hemos visto aparecer una estrella..."



sábado, 28 de diciembre de 2024

Navidad 2024


Anónimo francés, mediados del siglo XVII


Misterio adorable del Verbo Encarnado.  Junto a ti, Virgen Madre, permanecemos pensativos ante el pesebre donde está acostado el Niño, para participar de tu mismo asombro. ante la inmensa condescendencia de Dios. Danos tus ojos, María, para descifrar el misterio.

San Juan Pablo II, Navidad 2002


Fabrice Hadjadj: "La Libertad viene de la tradición"

Por Paloma López Campo , revista Omnes, 21.V.2025 · Fabrice Hadjadj es un filósofo y autor francés conocido por obras como “La suerte de hab...